Escrito por: SOS Internacional
Las fiestas se conocen comúnmente como la "temporada de dar". Esta época del año pone de relieve la importancia de hacer regalos y servir a los demás. Aunque estos actos tienen significado durante todo el año, su impacto es increíblemente profundo cuando extendemos nuestra bondad a extraños o necesitados durante las fiestas...les demuestra que se les ve y se les valora.
Algunos años, las vacaciones son diferente. Puede ser por una razón alegre, como dar la bienvenida a un nuevo hijo, a un pariente político o a un amigo. Otras veces, las razones del cambio pueden ser más difíciles; puede que echemos de menos a un familiar que no puede volver a casa o que ha fallecido. Nos damos cuenta de su ausencia o de que su sitio en la mesa está vacío.
Dwayne, fundador y presidente de SOS, compartió sus pensamientos: "Cuando pienso en los niños hambrientos durante las fiestas, no puedo evitar pensar también en las personas que se reúnen alrededor de mi mesa. Mis padres murieron en los dos últimos años, y reunirme en torno a la mesa durante las fiestas me hace echarles de menos. Aunque físicamente no puedo ocupar los asientos que ellos habrían ocupado, puedo crear espacios para que los niños hambrientos ocupen los asientos de las mesas en su honor. "
Este año, le animamos a invitar a uno o dos niños en situación de riesgo a unirse a su mesa navideña. Hacer huecos en las mesas de todo el mundo para que los niños reciban una comida es una forma de honrar la memoria de los que has perdido y "llenar" sus asientos.
Se trata de niños como Joseph, que sólo tiene 7 meses y ya lucha por su vida. Joseph nació en una de las comunidades más empobrecidas de Asia y sufre desnutrición generacional, una enfermedad que amenaza con devastar comunidades enteras. Afortunadamente, esta enfermedad tiene una solución sencilla: la alimentación.
Este año, diciendo "hay sitio en mi mesa" significa hacer un hueco a un niño en situación de riesgo mediante el regalo de alimentos. Tenemos la misión de recaudar $250.000 antes de final de año para facilitar la alimentación de emergencia en comunidades como la de Joseph. Por sólo $50, puedes proporcionar comidas a cinco niños durante todo un mes, ¡lo que da alimento y esperanza a los niños que más lo necesitan!
Entonces... ¿Hay sitio en tu mesa?
