Escrito por: Christie A.
Las conversaciones sobre la trata de seres humanos nunca son fáciles, pero con los más jóvenes puede ser especialmente difícil saber cuánta información presentar y cuándo. Esta es una tensión que queremos ayudar a las familias a afrontar, para elaborar intencionadamente la visión del mundo de los niños sobre este y otros temas importantes.
Hace unas semanas, estaba con mi hija de 9 años en uno de nuestros hogares de rescate. Ella no conocía el contexto del hogar, sólo sabía que iba a pasar el rato con sus amigos y a jugar. Estábamos recibiendo a unos invitados de fuera de la ciudad, amigos que luchan contra la trata. Cuando salimos del hogar de rescate, nuestros invitados empezaron a hablar de la trata, a hacer muchas preguntas y a querer saber cómo participar en la solución.
Esa noche, mientras mi hija se preparaba para irse a la cama, se tomó un momento para preguntar: "Mamá, ¿qué es el tráfico de niños?". Aunque su terminología no era correcta, sabía que había escuchado nuestra conversación y que su corazón buscaba respuestas a algo que sabía que era más profundo. Me di cuenta de que era el momento de ser sincera. Le dije que "la trata de niños es cuando la gente utiliza a los niños para pagar cosas. La gente paga para hacer daño a los niños y eso no está bien, pero hay cosas que podemos hacer para detenerlo". En ese momento, sabía que no quería causar miedo, pero quería ser sincera con ella. Le di una definición que podremos desarrollar con el tiempo, a medida que madure y comprenda. Habrá muchas más conversaciones, pero estoy sentando las bases.
A lo largo de los años he hablado con muchas personas sobre este importante tema. La trata de seres humanos es un problema grave que crece rápidamente. Es importante que hablemos de las cosas que importan, pero cuando se trata de los niños y la información sobre la trata, puede ser difícil de manejar. Queremos dar respuestas apropiadas a su edad que se ajusten a su nivel de madurez y comprensión.
He aquí algunos consejos para mantener estas conversaciones. En primer lugar, independientemente del nivel de detalle con el que hablemos, hay cuatro componentes que quiero que tengamos en cuenta al hablar de ello:
- No quiero causar miedo.
- Quiero ser honesto de una forma adecuada a mi edad, con una definición coherente que pueda desarrollar con el tiempo.
- Quiero construir su visión del mundo. (Para ello, mantengo conversaciones que consisten en "He aquí algunos hechos, y he aquí cómo veo/proceso esos hechos y por qué").
- Quiero preparar a los niños para que sean parte de la solución y sepan cómo mantenerse a salvo ellos mismos y a los demás.
Definiciones básicas de la trata de seres humanos:
Trata de seres humanos es utilizar a personas con fines laborales o sexuales mediante la fuerza, el fraude o la coacción.
Trata de niños es utilizar a niños con fines laborales o sexuales. Es importante señalar que en EE.UU. cualquier explotación de un menor se considera trata, no es necesario demostrar fuerza, fraude o coacción.
En segundo lugar, tomo esta definición básica y añado diferentes temas de conversación específicos para cada edad y etapa. He aquí algunas ideas para cada grupo de edad:
Niños de primaria (primaria mayor)
Mantengo esta conversación de forma reactiva. Si me hicieran una pregunta directa, respondería lo mismo que a mi hija: "el tráfico de niños es cuando la gente utiliza a los niños para pagar cosas. La gente paga para hacer daño a los niños y no está bien, pero hay cosas que podemos hacer para detenerlo". Sin dejar espacio para muchas preguntas, redirijo la conversación hacia las normas de seguridad y los recordatorios de lo que hacemos y por qué no debemos tener miedo.
Los temas clave en los que incidir durante los años de Primaria son las formas básicas de mantenerse a salvo.
Cosas que son útiles en esa conversación:
- La regla de las dos personas (no vayas solo a ningún sitio.)
- Un plan familiar sobre qué hacer si nos separamos unos de otros: En los sitios de grupos grandes decimos "si nos separamos, que todo el mundo se reúna en la fuente del centro, o en el baño del vestíbulo..." y cuando entramos en tiendas mis hijos saben que mi norma es "nunca saldré de la tienda sin ti, así que no salgas de la tienda sin mí". (Significado...no vayas al estacionamiento a ver si fui al auto...si no estás conmigo, no saldré de esta tienda"). Éstas son algunas de nuestras normas de seguridad. Te animo a que analices las tuyas propias y elabores las que mejor se adapten a tu familia.
- Asegúrate de que sepan tu nombre, dirección, número de teléfono y suficiente información para que puedan pedir ayuda si la necesitan. También enseño a mis hijos que, si necesitan ayuda, busquen a alguien con una etiqueta con su nombre. (Esto no es a prueba de fallos, pero les da más herramientas para desenvolverse en una situación potencialmente aterradora).
- Aquí tienes una divertida bingo de seguridad juego que incluye más temas de conversación sobre cómo mantenerse a salvo.
- Este libro tenía grandes ideas y fue un gran tema de conversación con mis hijos también.
Niños en edad escolar
El objetivo para esta edad es ayudarles a reconocer las zonas de vulnerabilidad y los posibles intentos de aprovecharse de ellas.
Algunos temas clave en los que incidir durante los años de enseñanza media:
- No deberían enviar ni recibir desnudos. Se trata de una conversación proactivaespecialmente si el niño tiene un teléfono. Sé que no queremos pensar que esto es un problema de la escuela secundaria, pero lo es, y tenemos que hablar de forma proactiva acerca de por qué enviar y recibir desnudos es algo malo y puede meter a todos en un montón de problemas.
- En cuanto a la educación sobre la trata, hablo con los niños sobre la coacción. Quiero que sepan qué es la coacción, qué aspecto tiene y cómo estar alerta.
- Coacción es persuadir a alguien para que haga algo utilizando la fuerza o amenazas. Aprender sobre la coacción es una medida de protección para tus hijos que, además, te permitirá conocer mejor a sus amistades cuando hables de ello.
- También hablo con los alumnos de secundaria sobre la seguridad en Internet. (Aquí tienes una práctica guía con 4 conversaciones que puedes mantener con tu hijo sobre la seguridad en Internet).
Niños en edad escolar
En mi experiencia, los alumnos de secundaria son suficientemente maduros y conscientes del mundo que les rodea; deberían saber lo que está pasando y cómo sus decisiones pueden marcar la diferencia. Hablamos abierta y honestamente sobre la trata, no exponiéndolos a la brutalidad de la misma, sino formando su visión del mundo sobre por qué no está bien y por qué los niños deben ser protegidos.
He aquí los puntos clave que toco en esas conversaciones:
- Cómo la pornografía y la prostitución contribuyen a alimentar la demanda y están directamente relacionadas con la trata de seres humanos.
- Cómo cosas como onlyfans y sugar babies/daddies se relacionan con la trata.
- Cómo estar seguros cuando empiecen a conducir. Cómo ser consciente de lo que le rodea y tener buenos planes para saber qué hacer si se queda tirado en algún sitio.
- Educarles sobre las diversas formas que adopta la trata de seres humanos. Me gusta mucho utilizar esta imagen para facilitar la conversación:
- Por último, aporto buenas estadísticas y cifras de impacto. Quiero enseñarles a encontrar buena información sobre la trata. Nuestro Recursos Gen-Z también es una gran herramienta para ayudar a educar a los alumnos de secundaria sobre la trata de seres humanos.
- También quiero que sepan qué hacer si se enfrentan a la trata o si tienen un amigo al que obligan a hacer cosas.
Es mucha información. Realmente se reduce a armarse con un montón de recursos e información, para sentirse preparado, pero luego inclinarse hacia una conversación honesta con un niño al que quieres y tener una charla sincera. No va a ser una conversación de una sola vez, pero estás sentando las bases y espero que con todas las ideas, enlaces, herramientas y recursos anteriores estés equipado con buenas maneras de navegar por una conversación difícil. Te animo. Gracias por hablar de las cosas que importan y abordar temas difíciles, ¡eso marca la diferencia!