Nuestras 5 prioridades básicas
Descubra nuestro camino estratégico para asegurar a los niños en riesgo.
Clasificamos los riesgos a los que se enfrentan los niños de riesgo en las siguientes áreas clave, enumeradas por orden de urgencia.
Necesidades básicas insatisfechas
Asegurar el mundo de un niño en riesgo empieza por satisfacer sus necesidades básicas. Un niño hambriento o sediento no puede aprender. La falta de comida y agua les hace más vulnerables a la trata.
Al proporcionar a los niños las necesidades básicas, su mundo es más seguro.
Amenazas externas peligrosas
Los niños vulnerables están expuestos a innumerables y peligrosas amenazas externas que minan su futuro.
SOS capacita a las Redes Locales de Atención para proporcionar seguridad a los niños en riesgo que se enfrentan a amenazas externas fuera de su control, como el tráfico de personas, las catástrofes naturales y la pérdida de los padres y de un hogar estable.
Analfabetismo
Hoy en día hay aproximadamente 258 millones de niños que no pueden ir a la escuela.
Los niños que no tienen una base sólida de lectura y escritura tienen menos posibilidades de éxito en el futuro.
Gracias a la educación, los niños adquieren las herramientas necesarias para luchar contra la pobreza y prevenir las enfermedades.
Aislamiento
Unas relaciones sanas y una comunidad vibrante colaboran para que los niños alcancen su pleno potencial.
Cuando las relaciones son débiles, las Redes Locales de Atención están facultadas para intervenir y satisfacer las necesidades que fortalecen las relaciones en torno a los niños en riesgo. Esta estrategia saca a los niños del aislamiento, fomenta su bienestar y los conduce a un futuro mejor.
Comunidades subdesarrolladas
Sin los recursos críticos necesarios para que un niño crezca y se convierta en un adulto próspero, las comunidades acaban atrapadas en la pobreza.
Invertir estratégicamente en las comunidades subdesarrolladas las equipa para dar a sus hijos la esperanza y las herramientas para un futuro mejor.